Año: 2019
Autor: Moreno, C. ; Ramos, P. ; Rivera, F. ; Sánchez-Queija, I. ; Jiménez-Iglesias, A. ; García-Moya, I. ; Moreno-Maldonado, C. ; Paniagua, C. ; Villafuerte-Díaz, A. ; Ciria-Barreiro, E. ; Morgan, A ; Leal-López, E.
Lugar de Edición: Madrid
Editorial: Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social
Año de edición: 2019
Descripción Física: gráf. y tablas
Páginas: 61 p.
Idioma: Español
Fuente: Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social
Formato: Electrónico
Temáticas: Salud
Otras temáticas: Relaciones sexuales
Descriptores: sexualidad, conducta sexual, anticoncepción, embarazo, adolescencia, adolescentes, madres adolescentes, España, anticonceptivos orales, preservativo
Resumen:
Un 35,1% de los chicos y chicas de la muestra de 15 a 18 años informa haber mantenido relaciones sexuales coitales. Este porcentaje es del 20,0% a los 15-16 años y del 48,3% a los 17-18 años. Son algo más los chicos que las chicas que lo afirman, tanto a los 15-16 años (21,6% versus 18,4%) como a los 17-18 años (49,6% versus 47,0%). Las cifras son algo mayores entre quienes pertenecen a familias con capacidad adquisitiva baja (37,8%) frente a los y las adolescentes de familias con capacidad adquisitiva media (33,7%) o alta (32,8%).
Con un 75,4% de adolescentes que informan haberlo utilizado en su última relación sexual, el preservativo es el método anticonceptivo más frecuentemente usado entre los y las adolescentes. Su uso es mayor a los 15-16 años (79,2%) que a los 17-18 (74,1%) y entre los varones (79,5%) que entre las chicas (71,2%). Sin embargo, al analizar por sexo y edad se observa que en el grupo de 15-16 años apenas hay diferencias entre las chicas y los chicos (78,5% frente a 79,8%), pero a los 17-18 años sí se encuentran claras diferencias que revelan un mayor uso entre los chicos que entre las chicas (79,3% frente a 68,7%). Son las y los adolescentes que provienen de familias con estatus socioeconómico bajo quienes menos lo utilizan (70,6%), frente a los y las de medio (77,4%) y alto (78,3%).
Respecto a la píldora anticonceptiva, informa haberla utilizado el 14,0% de los y las adolescentes que han mantenido relaciones sexuales coitales, siendo las chicas las que más lo refieren, en especial a los 17-18 años (18,8%). Tiende a usarse algo más entre los y las adolescentes de familias con baja capacidad adquisitiva (baja: 16,5%; media: 14,0% y alta: 12,2%).
Un 11,4% de los y las adolescentes que han mantenido relaciones sexuales coitales dice haber empleado únicamente la “marcha atrás” en su última relación sexual coital. Esta respuesta la dan algo más las chicas (12,5%) que los chicos (10,3%), y los y las adolescentes mayores (17-18 años: 11,8%; especialmente las chicas, 13,1%) frente a los más pequeños (15-16 años: 10,2%). Se trata de una práctica algo más común entre quienes pertenecen a familias con baja capacidad adquisitiva (13,2%) frente a los chicos y las chicas de nivel medio (9,4%) y alto (10,4%).
En lo que respecta a la edad de inicio de las relaciones sexuales coitales, se encuentra que, del grupo de adolescentes mayores de 15 años que ha experimentado relaciones sexuales coitales, el 10,3% las mantuvieron por primera vez a los 13 años o antes, siendo los porcentajes mayores en los chicos (12,4%) que en las chicas (8,0%). Estas diferencias entre chicos y chicas son mayores en el grupo de 15-16 años (7,1 puntos porcentuales) que en el de 17-18 (3,1 puntos de diferencia entre chicos y chicas. Los y las adolescentes de familias con capacidad adquisitiva baja parecen haberse iniciado antes en las relaciones sexuales coitales (11,8%), frente a los de alta (8,7%) y media (8,3%).
El 3,6% de las chicas de 15 a 18 años que ha tenido relaciones sexuales coitales informa haber estado embarazada en algún momento (este porcentaje equivale al 1,1% del total de las adolescentes de 15 a 18 años). Este hecho es algo más frecuente entre las chicas de familias con capacidad adquisitiva baja (4,4%) frente a las de media (3,2%) y alta (1,6%).
Por último, el 31,7% de las chicas de 15 a 18 años que ha mantenido relaciones sexuales coitales ha usado alguna vez la “píldora del día después” (este porcentaje equivale al 9,7% del total de las adolescentes de 15 a 18 años), cuyo uso es algo más frecuente entre las chicas de familias con capacidad adquisitiva media (32,1%) frente a las de alta (29,8%) o baja (28,1%).